Desde diciembre, nuestras nuevas botellas Frosch – hechas naturalmente con un 100% de plástico usado – pueden encontrarse en las estanterías de los comercios. La novedad es que la proporción del material extraído de la “Yellowbag” (plástico de consumo doméstico desechado al contenedor amarillo) y usado para la fabricación de nuestras botellas ha incrementado de un 50% a un 75%. Es una auténtica innovación del ”PET” que demuestra que el reciclaje respetuoso y favorable con el medio ambiente funciona.
Para nosotros, el plástico es un material que todavía acaba con demasiada frecuencia en una incineradora, o per aún, en el medio ambiente. Sin embargo, el plástico es un recurso valioso que no debería esfumarse. En Alemania, gracias a la Yellowbag. Tenemos la mejor fuente de reciclaje prácticamente en la puerta de casa. Como el reciclado mecánico de alta calidad consume poca energía, también evita las emisiones de CO2. Eso es bueno para nosotros y bueno para el medio ambiente.
En Frosch no vivimos sólo en una economía circular – también la desarrollamos constantemente. Juntos trabajamos para un futuro sostenible, un futuro que comenzó hace mucho tiempo en Frosch.